Ahora que llegan épocas navideñas, es un buen momento para hablar de regalos.
¡Os compartiré algunas ideas que pueden ser útiles!
- La primera es la conocida regla de los cuatro regalos para estas fiestas: un regalo para leer, el otro para llevar puesto, otro que sea alguna cosa que necesiten y el cuarto, alguna cosa que realmente les haga ilusión. https://www.guiainfantil.com/blog/navidad/regalos/la-regla-de-los-cuatro-regalos-de-navidad/
- La segunda idea que os quiero dejar viene de la mano de Kim Payne. Payne comenta que actualmente, nuestros hijos sufren de cuatro excesos: demasiada información, demasiada velocidad, demasiadas cosas, demasiadas opciones. Estos excesos lo son, especialmente, porque tenemos delante sujetos con un cerebro en vías de formación que quizás no puede sostener todas estas cosas en exceso. https://www.rinconpsicologia.com/2016/03/educacion-moderna-trastornos-infantiles.html
- La tercera idea es que hagáis la carta a los Reyes o al Papá Noel con vuestros hijos e hijas y, con tiempo. Lejos de la televisión, de los anuncios, de los dossieres que nos dejan en los buzones … Hacedla tranquilamente y dejadla reposar.
- La cuarta idea tiene relación con la teoría de las inteligencias múltiples de Hovard Gardner. Cuando a tu hijo le traen un regalo en sintonía con sus potencialidades, con sus inteligencias dominantes… ¡Es la bomba! ¿Y cómo lo sabemos cuáles son? Especialmente observándolo cuando no hace nada o dándole tiempo para aburrirse y que conecte con aquello que lo motiva sin que nadie le esté detrás diciendo lo que tiene que hacer. Os dejo un link donde explica la teoría y se comenta los pros y los contras puesto que no se considera que tenga una base científica a pesar de que en el mundo educativo ha causado furor! https://es.wikipedia.org/wiki/Teor%C3%ADa_de_las_inteligencias_m%C3%BAltiples
- Quinta idea. Todo lo que sean juguetes tecnológicos que vengan con un contrato, con unas normas, con unos horarios de uso y firmado por los Reyes, Papá Noel o el Tió. Siempre estamos a tiempo de dejar manga ancha. Pero vale más ser proactivo que reactivo (¡y esperar que el tema de los usos y abusos esté descontrolado para poner normas y horarios).
- Sexta idea. Estad a la moda, pero a la moda sana de velar por la coeducación. Para entender que no hay juguetes de niños o de niñas y, que quizás, ya no toca hablar de niños y de niñas sino de personas. ¡Y que si un hijo o una hija nos pide una muñeca o un tractor, respetemos sus deseos sea del sexo que sea! Bien nos parezca demasiado alternativo, bien nos parezca conservador, respetemos sus deseos (¡sin promover juguetes sexistas!).
- Y, ya para terminar, especialmente si tenéis niños o niñas entre los tres y los ocho años, no os privéis que Sus Majestades, sean de donde sean, traigan un cubo, una escoba, un recogedor o una fregona para todos los menores de la casa. Cuando son pequeños estas cosas hacen gracia. Vale la pena aprovechar que les hace gracia colaborar para promover que la familia es una pequeña comunidad donde cada cual puede poner su granito de arena para el bienestar de los otros. Si de pequeños integramos la colaboración en las tareas domésticas como trabajo de todos, de grandes será más fácil que lleven la basura a los contenedores sin refunfuñar… Mucho…